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DONACIONES

Nuestro fundador John Wesley animó a sus seguidores a difundir la buena nueva, transformar la desesperanza en esperanza y ayudar a los hijos de Dios dondequiera que estén. Sus contribuciones ayudan con los muchos programas que sirven a nuestros miembros y benefician a la comunidad de Santa Paula.

NECESITAMOS SU AYUDA

El Buen Pastor UMC es una de las pocas iglesias en la Comunidad de Santa Paula que ayuda a servir a las personas sin hogar y familias en situación de necesidad. Nuestra Iglesia está compuesta por familias de clase trabajadora que han crecido en Santa Paula y desean dar de vuelta a su comunidad. Sus contribuciones nos ayudarán a mantener nuestras puertas abiertas y a seguir sirviendo a los necesitados.

DONÉ EN LÍNEA

Sus contribuciones a su iglesia local tienen impacto regional, nacional e internacional a través de nuestro sistema de donación de conexión. La mayor parte del dinero que usted da apoya el trabajo de su iglesia local. Una pequeña parte financia los ministerios regionales. Otra parte de su donación va a la iglesia general para financiar programas a nivel nacional e internacional, acordados por los delegados de la Conferencia General.

Compartimos el costo de estos ministerios, siendo cada iglesia local responsable de contribuir con una porción justa o "prorrateo".

HÁGASE UN VOLUNTARIO

Ofrecerse y servir son una experiencia provechosa, la iglesia Metodista de El Buen Pastor depende en gran medida de voluntarios y miembros de la iglesia para apoyar nuestros servicios de adoración, programa de música, actividades de divulgación comunitaria, Escuela Bíblica De Vacaciones, biblioteca, y mucho más. 

Si usted está interesado en ser voluntario, tenemos un lugar para usted. Envíe un correo electrónico a: 

elbuenpastorumc@gmail.com or call (805) 525- 7268

ADMINISTRACIÓN

Pertenecer a nuestra congregación es ser mayordomo. Algunos pueden decir que la "mayordomía" es sólo una forma educada de referirse a la donación financiera a la iglesia.

Pero es mucho más que eso.
Un personaje en algunas de las parábolas de Jesús es el mayordomo, el siervo encargado por el amo de cuidar de la propiedad del amo.

Es el amo, no el mayordomo, quien es el propietario de la propiedad, pero el mayordomo es responsable de ella y es responsable ante el amo.Así es, dijo Jesús, entre Dios y nosotros. Como mayordomos de Dios, damos por nuestra gratitud al recibir tan abundantemente, queremos compartir con los demás. Echemos un vistazo a cuatro tipos de regalos que recibimos, gestionamos y compartimos:

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